domingo, 28 de julio de 2019

Apertura del “Molino”.


Este sábado 27 de julio de 2019, se celebró los 103° Aniversario del “Edificio del Molino” (sito en Callao y Rivadavia de CABA) con la apertura del mismo al público. Se pudo visualizar las tareas que vienen haciendo restauradores, arqueólogos entre otros profesionales de cada materia. Hubo largas filas de más de tres cuadras para poder ingresar. En exhibición dibujos, fotos, elementos encontrados en el lugar y como se está restaurando y que  técnicas están usando para el mismo. El final del recorrido fue en el salón donde funcionaba la “Confitería del Molino” donde se pudo disfrutar de una orquesta.

La recuperación integral del Edificio del Molino, declarado Monumento Histórico Nacional en 1997, incursiona en un abordaje poco habitual de la gestión patrimonial, que contempla la dimensión material e inmaterial de los bienes culturales, desde la multidisciplina y la pluralidad política, con el compromiso de involucrar la participación de la comunidad.

Habiéndose cumplido el procedimiento expropiatorio por parte del Gobierno Nacional mediante la Ley N°27.009, se transfirió el tradicional edificio porteño al Congreso de la Nación. La Comisión Administradora del “Edificio del Molino”, creada por dicha ley, ha tomado posesión del inmueble y comenzando con la ejecución del Plan de Restauración Integral del Edificio del Molino – RIEM-.

Un poco de Historia: Los tiempos del Molino:                                      

1850: Constantino Rossi y Cayetano Brenna, destacados pasteleros de origen italiano, inauguran la “Confitería del Centro”, ubicada en Rivadavia y Rodríguez Peña. En 1866, el comercio pasa a llamarse “Antigua Confitería del Molino” y, en 1905, se traslada a un nuevo local en Rivadavia y Callao.

1916: El 9 de julio, en conmemoración del Centenario de la Independencia, la panadería se reinaugura como “Confitería del Molino” en un edificio que integra varias propiedades linderas y que se transformara en un ícono del art nouveau en la Argentina, obra del arquitecto Francisco Gianotti.

1930: Durante el golpe de Estado que derrocó a Hipólito Yrigoyen, la confitería es incendiada y se cierra. La reconstrucción demanda casi un año de trabajo.

1978: Se produce la quiebra comercial de la confitería y es adquirida por los nietos de Cayetano Brenna, quienes introducen una serie de mejoras para adecuarla a los nuevos tiempos.

1997: La crisis empuja a la confitería a cerrar sus puertas. Es declarado monumento histórico nacional –Decreto N°1.110/97-.

2014: Se sanciona la Ley N°27.009 –de autoría del senador (m. c.) Samuel Cabanchik- que declara al inmueble “de utilidad pública y sujeto a expropiación, por su valor histórico y cultural”, y se procede a su expropiación.

2018: En el mes de julio, el Congreso Nacional, a través de la Comisión Administradora del Edificio del Molino, toma posesión del inmueble e inicia las tareas de recuperación.

Acuarelas:

Carlos Gardel le encargó a Cayetano Brenna un postre para homenajear a su amigo, el reconocido jockey uruguayo Irineo Leguisamo. Así nació el legendario “Leguisamo”, que en su origen no llevaba dulce de leche.

En el año de la Revolución Bolchevique, Brenna inventó el “Imperial Ruso”, que pasó a ser conocido como el “postre argentino”.

Artistas de la talla de Niní Marshall y Libertad Lamarque visitaban la Confitería. Del ámbito literario, pasaron grandes personalidades como Roberto Arlt, Leopoldo Lugones, Oliverio Girondo y Enrique González Tuñón. Así, el café del Molino tuvo presencia en numerosas obras artísticas, como, por ejemplo, en las menciones de Bustos Domecq – Jorge Luis Borges y Adolfo Bioy Casares.

El tango “Grisel”, de 1942, con letra de José María Contursi y música de Mariano Mores, refleja una singular historia de amor entre su creador y la protagonista, quienes se reencontrarían, 22 años después, en la Confitería.

La Confitería del Molino fue conocida como la “Tercer Cámara” porque era el espacio de encuentro entre senadores/as y diputados/as nacionales. Algunos/as tenían una cuenta abierta, dada la frecuencia con la que asistían. Los mozos, sabedores de sus gustos, esperaban con las mesas reservadas.

Lisandro de la Torre solía tomar, todos los días, un café en sus instalaciones y Alfredo Palacios disfrutaba a diario de su cognac y del ritual del café, mientras dejaba su sobretodo en custodia para no entrar tan abrigado al Congreso. Pasar a buscarlo, al salir, era la excusa para enredarse en otra mesa de conversaciones políticas.

La superficie total del edificado es de 7.600 m2.

En los tres subsuelos funcionan los servicios y mantenimiento, producción de pastelería y fábrica de hielo.
En la Planta baja funcionaba la confitería y venta de productos de pastelería.
En el Primer Piso funcionaba el salón de fiestas.
Cuatro pisos –del 2do al 5to.: Se dividen en ala Rivadavia –dos departamentos por piso- y ala Callao un –departamento por piso.
En la Torre: Cúpula y mirador.

Restauración Integral del Edificio del Molino RIEM.

El Edificio del Molino es un ícono de la arquitectura art nouveau en la Argentina, ubicada en la llamada Manzana Legislativa de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Con más de un siglo de historia, posee una estructura metálica, con mampostería de ladrillo como cerramiento, entrepisos de perfilería metálica con bovedilla y piezas de hormigón premoldeado en escaleras y torre-cúpula. Cada espacio presenta, según sus usos, pisos de piedra-mármoles de procedencia europea-, finos pisos de madera u ornatos premoldeados de yeso estucado o con toques dorados.
En el marco del plan de Restauración Integral del Edificio del Molino., un equipo multidisciplinario de especialistas del Congreso Nacional se encuentra trabajando para recuperar el patrimonio material e inmaterial del inmueble. Su Comisión Administradora, en forma conjunta con el Ministerio del Interior, Obras Públicas y Vivienda de la Nación y con el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, lleva adelante un proyecto modular para su puesta en valor.
En el mismo sentido, se han establecido convenios de colaboración con universidades para brindar apoyo en sus distintas áreas de incumbencia.
Para garantizar la participación de la sociedad civil se integrará, a través de un concejo asesor, a las entidades que velan por la salvaguarda y preservación del patrimonio cultural.










Foto grupal: Alejandro Machado (Red de Blogs Patrimoniales) y Equipo de Arqueología del Molino a cargo de la Lic. Sandra Guillermo (derecha).

No hay comentarios:

Publicar un comentario